2. Un mundo básicamente rural.
La hegemonía del sector primario.
En el siglo XVIII, en general, era una producción de subsistencia. Se dedicaba a cultivar cereales (base de la dieta) y otros productos destinados al comercio, la vid o el olivo.
La propiedad de la tierra estaba fundamentalmente en manos de los priviligiados.
-> Las tierras de la nobleza nunca se dividían debido a los mayorazgo (ley que obligaba a transmitir todo el patrimonio al hijo mayor del señor)
-> Parte de las tierras del clero, las manos muertas, tampoco se podían vender al estar bajo la protección directa del rey.
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